Amor de infancia

Lo conocí en el campo de Ovalle Pedregal. Éramos niños, yo tenía 7 y él 8 años, era muy lindo tierno, caballero, simpático. Yo tuve que irme para la ciudad de Arica porque en el campo no me querían tener por un peligro que corría. Yo nací el 3 de octubre con luna llena, mi abuela me decía que era muy especial y era verdad soy una de las elegidas, en mi cuerpo tengo la marca de una luna, no es un tatuaje si no una luna marcada en mi pecho, es como una marca de nacimiento, es algo extraño, lo sé, pero a la vez algo mágico.

Me fui pero él decidió venir conmigo, estuvimos muchos años juntos, hasta que en el año 2005 me dijo: tengo que irme a España a cumplir una promesa que hice.

Yo le pregunté “¿sky, y vas a volver por mí, por el amor que tenemos?” y él me dijo: “sí, cielo, voy a volver por el gran amor que te tengo, es una promesa, mi corazón es tuyo y siempre lo va a ser. Te amo”. Yo le dije: “la luna de mi pecho y la del cielo siempre te van a cuidar, nunca lo olvides, y el amor que te tengo siempre estará ahí para ti. Te amo”.

Se fue. Después de cuatro años sin hablar y sin vernos él volvió para mi cumpleaños pero distinto
no era ese niño con la mirada dulce y caballero, era otro. Su mirada era fría y sin amor cuando me vio dijo: “ya no te amo era todo mentira”. Pero yo sentía que era mentira. A la mañana siguiente le pregunté: “¿es verdad sky que no me querías, que el te amo era mentira, dime la verdad porque yo ya la sé”. Mentira, la verdad no lo sabía, no entendía qué le pasaba pero tuve que decirle eso para que me dijera la verdad, y me la dijo: “Mi cielo, yo nunca te amé, era todo mentira pero mi destino es cuidarte, eso es lo que me dijeron en España, fue tu abuela la que me dijo que eras una elegida y yo le dije que te amaba pero me dijeron que tu amor no era correspondido. Perdón cielo por mentirte pero me cuesta asumir la verdad”. Y yo le dije: “Sky te amo y no importa lo que digan los demás pero quédate junto a mí”. Y me dijo: “no soy tu guardián y eso voy a hacer”.

Pasaron dos años y el 31 de octubre a las 23:58 en punto de la noche con luna llena yo salí a ver qué tan brillante estaba la luna. De repente vi una sombra acercándose a mí cuando de repente saltó mi amado sky para protegerme cuando vi que le habían clavado una daga en su vientre, sangrando demasiado yo lo tomé en mis brazos y le dije: “no mueras, yo te amo, no me dejes sola por favor”. Entre lágrimas le gritaba que abriera sus ojos pero con su último suspiro me dijo: “Cielo te amo y siempre te amaré, nunca lo olvides, desde el cielo azul te voy a cuidar y mirar siempre nunca vas a estar sola. Te lo juro”. Y sus últimas palabras fueron: “Cielo te amo con todo mi corazón te amoooo”. Y falleció en mis brazos.

No es fantasía, es verdad, una historia de amor que a mi hijo le cuento y ojalá que a mi futuros nietos igual le contaré. Sí, tuve un hijo de sky, es igual a él con sus grandes ojos verdes. Es mi futuro y mi vida, es el gran fruto de un amor verdadero.