Solo quedaron cenizas de mujer y su corazón

En mi corazón ya no existía lugar para nadie.

Hace tres años me enamoré de una persona de mi escuela, no era guapo ni rico pero me hacía reír a carcajadas, a mí no me importó si era pobre, el más guapo, nada de eso… Yo me sentía tan enamorada, había amor en todos los poros de mi cuerpo, todos me veían enamorada y feliz. Nunca supe si me quería bien o no y yo me le declaré a él pidiéndole que fuera mi novio pero me dijo que me veía como una hermana, después me enteré de que tenía novia.

Unos meses después me seguían enamorando sus detalles, sus chistes, sus bromas, estaba todo el tiempo conmigo, salía conmigo, me pidió que lo ayudará a dejar a su novia, yo feliz acepté porque pensé que al fin iba a existir un noviazgo.

En fin pasó el tiempo y nada cambió, no fuimos novios pero seguíamos saliendo juntos todo el tiempo. A veces él era distante y no lo llegué a entender muchas veces pero aún así lo amaba. Llegó diciembre de 2011, el mejor año de mi vida, fuimos a un concierto en donde me demostró que en verdad quería algo conmigo, me dio un beso en la frente y me protegió a capa y espada de cualquier peligro, pasados los días me robó un beso, un beso que me traía loca y feliz y más enamorada y sí, lo amaba, sé que amar y la palabra amor son muy difíciles pero realmente le amaba.

Pasó año nuevo y regresamos a la escuela, normal, todo normal, como siempre todo mi tiempo era para él no existía nadie más que él, ni amigas ni nadie. El 7 de enero de 2012 quien diría que desde ese día empezaría mi infierno, mi cruz.

Yo ya tomada ese día le pedí que me regalara un beso, él no dudó ni un segundo y así fue dándome besos y yo tocando sus manos me sentía en el cielo y cinco minutos después bajé al infierno, yo le confesé que lo amaba y él me dijo que no me quería, que merecía algo mejor que él… Yo me quedé helada, en shock, y sentí cómo lágrimas brotaban de mis ojos y mi furia creció, yo me levanté un mar de lágrimas y le di una cachetada y me solté a decirle groserías y a estar incontrolable.

Ya más tarde me habían consolado mis amigos, llegué a mi casa y no sentía nada, es como si me hubieran arrancado el alma y llevado toda mi alegría, ese día me mató, mató mi amor y mis esperanzas. Yo no podía verle a la cara, el lunes me sentía morir, sólo quería escapar y no verle. Lo perdoné pero yo ya había perdido las ilusiones de formar algo con él y así pasó el tiempo hasta que nos graduamos.

En 2013 aún lo veía pero no como antes, sólo de hola y adiós. Él se dedicó a drogar y a fumar y a llevar una vida de fiesta y chicas. Mientras, yo seguí mi vida en solitario lejos del amor y de chicos, me dediqué a la escuela. Me he intentado enamorar pero no lo he logrado y llegué a la conclusión de que en mi corazón ya no existía lugar para nadie porque ya no quedó nada de la niña que se enamoró, sólo quedaron sus cenizas.

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3 Comments

  1. says: maco

    bien. esta historia se parece aun que alguna vez (en mi juventud) me sucedio muchas veces nos ilucionamos nos enamoramos de alguien que solo quiere amistad

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