Adolescentes en la isla

Me dijo que no quería perderme, que quería verme.

El viernes pasado mi tía me invitó a un viaje para la isla, ella y yo solamente, al principio no quería pero terminé aceptando y sin muchas ganas fui. Cuando llegamos a donde nos teníamos que hospedar me di cuenta que me estaba imaginando algo muy diferente, pues llegamos a una casa de pescadores, una casa bastante pobre y cochina.

Apenas vi en la cama que me tocaba dormir le dije a mi tía que quería irme de ahí, que me daba asco y que no encontraba el sentido de estar ahí. Mi tía me dijo que me relajara que más tarde llegarían muchachos y muchachas de mi edad que me llevaría muy bien con ellos.

Para desestresarme un poco fui a caminar al pueblo eran como las 2 de la tarde y pegaba mucho sol, solo estuve sentada en la plaza. Era un pueblo muy pequeño y eran las fiestas patronales así que había mucho movimiento en la calle. Ya me había aburrido de estar ahí sentada y decidí entrar y acostarme, el viaje en el barco me había agotado mucho. Me recosté en la cama y me quedé dormida un buen tiempo, cuando desperté ya era de noche y todos se estaban vistiendo para salir a la fiesta.

Yo me di cuenta que cuando entré al cuarto debajo de la cama había unos zapatos de hombre que ni idea de quién eran. Cuando me doy cuenta entró un muchacho alto, de piel muy clara, cabello corto castaño, hermoso, creo que jamás he visto rostro tan bonito y perfilado con unos ojos marrones miel que no pude disimular y cruzamos miradas mientras él se agachaba a agarrar sus zapatos y nos quedamos viendo un buen rato pero como que le dio un poco de pena y yo noté comó sus mejillas se sonrojaban y salió rápido del cuarto y cerró la puerta.

Me quedé pensando, dios pero qué lindo ese muchacho pero le calculaba como unos 15 años y yo soy mayor que eso, así que no le pare mucho. Me fui a bañar y vestir para salir también con un muchacho que apenas llegue me presentaron, bastante feo, vivía en esa casa. Al salir me di cuenta que el muchacho lindo había salido después de mí. Yo caminé hacia la plaza y sentía que me veía y volteé y estaba detrás de mí, me pidió un cigarrillo y lo prendió con el mío, se acercó bastante a mí para poder aspirar y luego se fue.

Cuando entré al bar ya estaba instalada, bebiendo y fumando como una chimenea. Al voltear a la entrada lo veo mirándome, se dio cuenta que vi su presencia ahí y se fue corriendo. Me sentí bastante extrañada y confundida pero no le paré pues ni sabía quién era… No lo vi más, cuando llegué de madrugada a la casa no lo vi por ningún lado, me imagine que se había quedado en la disco o en otro bar, me bañé y me acosté a dormir.

A la mañana siguiente desperté sola en la habitación, pero en la cama de al lado estaba una ropa doblada, era de hombre pero no sabía qué hacía ahí. Cuando salí al porche de la casa estaba él, sin camisa, jamás había visto espalda tan hermosa, tenía ganas de abrazarlo por detrás, me acerqué a él y le dije, hazte una foto conmigo. Él se quedó muy confundido, pues éramos dos extraños ni sabia su nombre, ni quién era, ni qué hacía en esa casa, nos tomamos la foto y yo me iba a ir a la playa que estaba como a dos cuadras de la casa pero él me paró y me agarró por la mano, bastante suave y me preguntó. ¿Cómo te llamas? Y le di mi nombre a lo que el respondió: “qué lindo”, me soltó y entró a la casa.

Yo seguí mi camino y me bañé en la playa. Me acosté en la arena a tomar un poco de sol, del otro lado de la playa quedaba el muelle y escuché que alguien se lanzó, era él… salió y se sentó en unas redes que estaban ahí, wow, qué cuerpo tan bello tiene, unos abdominales poco marcados y su espalda, dios pero qué espalda. Me di cuenta que me estaba viendo fijamente pero cuando yo volteaba él despistaba la mirada…

Me fui a la casa a bañarme pero como tenía traje de baño me bañé ahí mismo en el patio, él entró después de mí y se sentó en una silla ahí mismo en el patio y me veía cómo me bañaba, eso me puso muy nerviosa y me bañé lo más rápido que pude y entré al cuarto. Como a la media hora entro él… y se sentó a mi lado y comenzamos a hablar.

Hablamos toda la tarde y cada vez nos poníamos más comodos, nos acostamos pero bastante distantes, ya pasadas las horas estábamos muy cerca, cara a cara. Cuando se atrevió a besarme vi el cielo, qué labios tan suaves y qué besos tan ricos, una muchacha que también estaba ahí de visita nos vio besándonos y me vio con molestia y salió del cuarto lanzando la puerta. Él se alejó y se sonrojó muchísimo, al darse cuenta que estábamos solos de nuevo siguió besándome, pasamos besándonos toda la tarde, acostados en la cama, pero solo besándome, ya yo estaba muy excitada y quería más pero él solo se limitaba a besarme y tocarme el cabello, ahí noté su inexperiencia, pues era solo un niño y bueno me quedé tranquila.

De noche nos vestimos y salimos un rato, él me dijo y si vamos al muelle? Y yo le dije a hacer qué? Me dijo lo que se nos venga en mente. Yo acepté y fuimos al muelle, estaba muy oscuro y desde tierra no se veía el final del muelle… Nos acostamos en unas redes al final y comenzamos a besarnos muchísimo y viendo las estrellas me abrazaba muy rico, pero yo veía que no hacia más nada y yo estaba excitadísima, reaccioné de manera que le baje el pantalón y le dije que se colocara encima de mí. Él como que no sabía qué hacer, lo besé mucho y comenzó a besarme por el cuello, continuó e hicimos el amor bajo la luz de la luna, viendo las estrellas y de fondo los fuegos artificiales de la fiesta en la plaza y la música que llegaba muy suave a donde nosotros estábamos. Fue fenomenal creo que la mejor experiencia de toda mi vida.

Nos quedamos un rato dormidos desnudos juntos abrazados, luego fuimos a la casa y yo me metí a bañar y él salio al pueblo otra vez. Fui al porche y regresó, se sentó a mi lado estuvimos hablando y besándonos de piquito hasta tarde, cuando salió su mamá y dijo para adentro que ya es tarde.

El cuarto estaba lleno de gente ya ocupando la cama pero había como dos puestos en una cama y uno en la otra. Yo pensé como si fuera obvio que él se acostaría en una cama con su mamá y yo en la otra, pues no. La mamá se acostó en el puesto solo y nos dijo acuéstense ahí en el puesto de dos, no lo pensamos dos veces y nos acostamos uno al lado del otro jamás dormí tan rico, abrazada de un chico que ya me traía loca.

A la mañana siguiente él se levantó antes y me puso los zapatos, fui muy tierno y me dio un beso en la mano y se fue a bañar, yo también salí pero al rato y no lo vi por ningún lado. Ya era hora de irnos y yo no sabía nada de él, segundos antes de salir de la casa para irnos al barco entro él y me agarró de la mano y me llevó al cuarto, me dio un beso de pico y me dijo que no quería perderme, que quería verme, que le diera mi número para vernos cuando llegáramos a la otra isla que era donde vivíamos cada uno, le di mi número pero no me dio el suyo porque no tenía teléfono pero me dijo que como sea él se comunicaba luego conmigo. Ya es martes y no me ha escrito pero me mandó con su mamá una foto de él. Espero aún que me escriba.

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